Susana Rodríguez Lezaun: «Escribir siempre ha sido algo natural para mí»


Tenemos con nosotros a Susana Rodríguez Lezaun autora de la trilogía protagonizada por el inspector de policía David Vázquez y directora del festival Pamplona Negra. Su última novela es Una bala con mi nombre.

¿Cuándo empezó a escribir y qué le llevó a ello?

He escrito siempre. Primero pequeños cuentos, cuando era una niña y de adolescente, después artículos y reportajes, ya como periodista, y ahora novelas. Ha sido una especie de evolución lógica, mientras yo crecía, lo hacía también la escritora que llevaba dentro. No hubo nada que me llevara a escribir, siempre ha sido algo natural para mí.

De tu nueva novela, Una bala con mi nombre, gente como Toni Hill, Juan Gómez Jurado o Alicia Jiménez Bartlett, han hablado muy bien ¿Qué se va a encontrar el lector en sus páginas?

Quienes citas, junto con el resto de grandes escritores que han dedicado unas horas a leer la novela y dedicarme unas frases, han sido muy generosos. Les estoy inmensamente agradecida. Creo que Una bala con mi nombre es un thriller puro, con la esencia de esas novelas norteamericanas que te mantienen pegada al libro. Ni los malos ni los buenos son lo que parecen, los personajes son la base de la historia y la acción no cesa de principio a fin. Quiero, sobre todo, que el lector se divierta, exclame y sonría mientras lea esta novela. Quizá es demasiado ambicioso, pero esa era la intención.

Hay bastante unanimidad en que gran parte del éxito de la novela, además de por su ritmo trepidante, está en la protagonista, Zoe Bennett ¿Cómo se gesta un personaje así?

9788491393894Creo que sin Zoe Bennett la novela sería otra cosa. Las mujeres de mediana edad son las grandes olvidadas. Las novelas, el cine y la sociedad en general las invisibilizan, y sin embargo, lo único que ha pasado es el tiempo, ellas son las mismas, incluso más válidas que cuando tenían veinte años. Me parece tan injusto que Zoe es un puñetazo en la mesa. Ella es una mujer independiente, solitaria, una gran profesional que a lo único a lo que aspira en la vida es a hacer bien su trabajo. Sin embargo, cuando Noah Roberts se cruza en su camino y ella decide abandonar por unos días la senda, se ve envuelta en un lío terrible del que no está segura de salir con vida. Pero ella, lejos de acobardarse o esconderse y llorar, levanta la cabeza y decide pelear. No le importa perder, pero lo hará dando la cara. Nadie se lo esperaba, y ahí está el quid de la cuestión. Que ella lucha. Me interesaba mucho también plasmar su evolución psicológica, cómo pasa de ser una mujer gris y anodina que, de pronto, se ve obligada a cometer los actos más impensables para intentar salir con vida de una situación terrible. Una restauradora de arte convertida, de la noche a la mañana, en una fugitiva, ladrona y asesina.

En esta ocasión has cambiado la Navarra de tus primeras novelas por Boston ¿A qué se debe este cambio? ¿Por qué este tipo de thrillers se suelen situar en los EEUU?

Estados Unidos es la cuna del thriller, y siendo Una bala con mi nombre un homenaje a este género, no podía situarse en ningún otro lugar. Elegí Boston por su museo (no olvidemos que la novela se desarrolla en torno al robo de unas joyas), por su orografía sinuosa, perfecta para una persecución en coche, por sus parajes solitarios… y por ser la cuna de Aerosmith, uno de mis grupos favoritos. Sin desmerecer ninguno, los grandes thrillers son norteamericanos. Thriller suena a Nueva York, Chicago, Washington, FBI, Ruta 66, Los Angeles, San Francisco… y Boston.

Con sus novelas se ha posicionado claramente en la novela negra ¿Ha pensado cambiar de género?

Alguna vez he dicho que me gustaría, pero lo cierto es que no. Estoy cómoda en la novela negra, siempre que pueda escribir un thriller de vez en cuando. Me gusta el género, me gusta la libertad que me da para hablar de temas candentes como la violencia de género, la corrupción, la maldad… Quizá un día escriba algo diferente, pero hoy por hoy, creo que me quedo aquí.

Antes de Una bala con mi nombre publicaste una trilogía protagonizada por el inspector de policía David Vázquez ¿Recuperará este personaje en próximos libros?

No lo creo. El final de la trilogía me deja un personaje muy torturado y complicado. No me atrae desarrollar más un personaje de ese calado, y nadie se creería un David Vázquez tranquilo y feliz en una nueva entrega, como si no hubiera pasado nada. Creo que David Vázquez e Irene Ochoa van a dormir el sueño de los justos, aunque ya sabe lo que dice el refrán: Nunca digas nunca jamás…

Háblenos del festival Pamplona Negra, que usted misma dirige.

Pamplona Negra es uno de los retos más apasionantes a los que me he enfrentado en mi vida. El próximo mes de enero, dentro de muy poco, daremos el pistoletazo de salida a la sexta edición, que tendrá a Estados Unidos como país invitado. Contaremos con la presencia de grandes nombres del género, como Rosa Montero, Lou Berney, Dolores Redondo, Reyes Calderón, Agustín Martínez, Carlos Bassas y un largo etcétera, y mantenemos, por supuesto, nuestra seña de identidad, El crimen a escena, donde expertos en la materia hablarán sobre la autopsia, la identificación a través del ADN, la ciberdelincuencia, etc. Creo que es una cita que cada año va a más y estoy orgullosa de tener la oportunidad de aportar mi pequeño granito de arena.

¿Cómo ve el actual panorama de novela negra en España?

Lo veo bien, realmente bien. Es difícil que la novela negra, tanto nacional como internacional, haya vivido antes un momento tan dulce como el presente. Las editoriales se interesan por el género e invierten en su promoción, hay escritores y escritoras de muchísima calidad que presentan obras que se convierten en clásicos de la literatura, se traducen grandes títulos, abundan los festivales de novela negra y cada vez hay más lectores. Es fantástico. Algunos colegas aseguran que esto sólo es una burbuja y que llegará el día en el que explotará. Yo no estoy de acuerdo, pero si un día explota, lo disfrutaremos mientras dure.

Bueno… ¿Y ahora qué? ¿Qué proyectos tiene?

¡Sigo escribiendo, por supuesto! Siempre estoy escribiendo. Tengo una nueva historia entre manos de la que no puedo contar nada, pero estoy entusiasmada y con la cabeza llena de escenas, personajes… y cadáveres.